domingo, 1 de noviembre de 2009

Sobre "Los pilares de la Tierra" de Ken Follet

Leí "Los pilares de la Tierra" motivada por la buena impresión que me dejó "La Catedral del Mar". Debo reconocer que la sorpresa al leer "Los pilares..." fue maravillosa. Ken Follet nos regala un prólogo que nos ubica perfectamente en el sentir del autor y la relación que tiene con el tema de su novela. La historia está llena de pequeñas historias entrelazadas entre sí, pero cada una de éstas historias tiene desarrollo propio, clímax y conclusión, de manera que los personajes van pasando la estafeta protagónica envejeciendo y generando nuevos conflictos y situaciones. Todo ésto fluye alrededor de la construcción de una catedral, en donde se narra la parte humana de los trabajadores; es decir, la forma en que viven, cómo se organizan, como trabajan y las herramientas que emplean, información sobre la sociedad medieval y sobre todo, de la importancia que tenían las catedrales en ese periodo. Se aportan datos sobre la arquitectura medieval no sólo de Inglaterra donde se desarrolla gran parte de la historia, sino de Francia con sus grandes catedrales góticas. La narrativa es detallada, muy detallada diría yo, conforme leía podía ir formando en mi mente los paisajes y personajes. Es una obra de muchas hojas, las necesarias para quien gusta de este tipo de novelas en donde todos los detalles cuestan. Tiene buen ritmo y fluidez, la historia seduce desde la primera página y los capítulos te llevan de una historia a otra que se desarrolla paralelamente. Como en todas las traducciones de libros, hay palabras para las que el traductor no encuentra equivalencias para acercar lo más posible el concepto original del autor y prefiere dejar la palabra original, en este libro sucede eso con algunas palabras, pero si no son quisquillosos eso no representa inconveniente alguno, aunque también está la posibilidad de leerlo en su idioma original.

No hay comentarios: